Tradicionalmente, fenómenos naturales como los rayos han sido los principales causantes del fuego.
Actualmente, la inmensa mayoría de los incendios tiene su origen en accidentes, negligencias en las tareas agrícolas o en el uso recreativo de nuestros montes, y en el vandalismo que da lugar a un número cada vez mayor de fuegos intencionados.
Para evitar los incendios siga los siguientes consejos:
• Si observa un incendio forestal o una columna de humo, avise a las personas que viven cerca y comuníquelo al teléfono 112.
• Si se hace fuego en lugares autorizados asegúrese de que al marcharse quedan apagados con agua y tierra y no abandone los rescoldos hasta que dejen de humear.
• En caso de condiciones meteorológicas que favorezcan la propagación de incendios, absténgase de encender fuego.
• No conduzca a través del humo. Sitúe su vehículo en un lugar sin vegetación, alejado del fuego y encienda las luces.
En caso de encontrarse en un incendio, tenga en cuenta:
• Observe la dirección del fuego y prevea una salida de escape.
• La ropa le protegerá.
• Respire con un pañuelo húmedo tapando boca y nariz.
• Vigile el viento, un cambio puede hacer que el fuego le rodee, vaya siempre en sentido contrario.
• Trate de ir a las zonas más desprovistas de vegetación.
• No huya del fuego ladera arriba, es mejor pasar por los flancos o zonas ya quemadas no huya hacia barrancos, hondonadas o agujeros, procure quedarse junto a cortafuegos o barreras naturales (río, carreteras).
• Si el fuego le rodea sitúese en tierra ya quemada.
• Conserve la calma y obedezca las instrucciones de los agentes forestales o de protección civil.