En lugar de hollar el texto con subrayados, opto por dejar aquí algunos párrafos que voy disfrutando del primer ensayo de Ralph Waldo Emerson titulado Historia.
¿Cuál es el fundamento de ese interés que todos los hombres sienten por la historia, la literatura, el arte y la poesía griega, en todos sus periodos, desde la época heroica u homérica hasta la vida doméstica de los atenienses y espartanos, cuatro o cinco siglos después? ¿Cuál, salvo que todo hombre pasa personalmente a través de un periodo griego?. El estado griego es la época de la naturaleza corporal, la perfección de los sentidos, de la naturaleza espiritual desplegada en estricta unidad con el cuerpo.
Cuándo admiramos lo antiguo no miramos lo viejo, sino lo natural.
Los griegos no son reflexivos, sino perfectos en sus sentidos y su salud, con la más hermosa organización física del mundo. Los adultos actuaban con la simplicidad y gracia de los niños. Fabricar un vaso, tragedias y estatuas como las harían los sentidos saludables, es decir con buen gusto.
Cuando un pensamiento de Platón se convierte en un pensamiento para mí, cuando una verdad que encendió el alma de Píndaro enciende la mía, el tiempo ya no existe.
El hombre que avanza descubre la profunda propiedad que tiene en la literatura, tanto en todas las fábulas como en toda la historia. Descubre que el poeta no fue un tipo curioso que describió situaciones extrañas e imposibles, sino el hombre universal que escribió con su pluma una confesión verdadera para uno y verdadera para todos.
Traducción de Javier Alcoriza.