¿Cual es la mejor camara digital? Mucha gente se hace esta pregunta. Y el proceso de decisión es realmente una tortura… »Cuando ya tenía elegido el modelo… de repente leo en un foro que la cámara digital que quiero tiene multitud de problemas por no-sé-qué o por no-sé-cual…» Una decisión correcta requiere fundamentalmente que se haga en base a información lo más completa posible, pero… ¿qué pasa si no sé nada de fotografía digital?
Factores más importantes
Tamaño
Es un factor clave. Y depende mucho del fotógrafo. La mejor cámara digital es la que vas a llevar siempre que se produzca una situación que te gustaría capturar. A menudo hay grandes equipos fotográficos (y voluminosos también) que se quedan en el armario porque a su propietario le da pereza sacarlo. Otras veces, el fotógrafo no se siente cómodo con una cámara por no tener el cuerpo y el peso suficientes. La decisión acerca del tamaño requiere de un ejercicio de auto-análisis.
Resolución
El neófito en el mundo de las cámaras digitales está buscando números que pueda comparar para decidir qué cámara es mejor y cuál peor. Sucede algo parecido a lo que pasa con los ordenadores y si tiene tantos GHz o tantos otros: muchas veces es más rápido y ofrece un mejor rendimiento un ordenador con menos GHz que otro. Desafortunadamente las cosas no funcionan de ese modo. En el mercado hay gran cantidad de cámaras de 3 Mpxs mucho mejores que otras de 5 Mpxs.Por tanto, no conviene obsesionarse con el número de megapixels (Mpxs). Sí hay que tener en cuenta que la impresión con calidad alta de fotografías al tamaño estándar de 10×15 cm sólo require 2 Mpxs. ¿Para qué quiero entonces mayor resolución? Hay varios casos en los que se requiere mayor resolución:
- Cuando quiero imprimir fotografías con calidad alta en formatos mayores de 10×15 cm
- Cuando la parte que me interesa de una fotografía es sólo un pedazo y quiero imprimirla con cierto tamaño
En cualquiera de los casos, hay algunos modelos en el mercado de marcas desconocidas que intentan atraer la atención del comprador con menesajes del tipo 5 Mpxs por 99 Euros. La verdad que hay luego por detrás es que esos 5 Mpxs no son reales, sino interpolados, que la fidelidad en la representación de colores deja mucho que desear y que las aberraciones del objetivo son sencillamente espeluznantes. Es una realidad que la electrónica de los equipos reduce sus precios casi a diario, pero conviene no olvidar que la óptica no sigue el mismo ritmo, y que una buena óptica impone un precio mínimo
Óptica
Es un elemento muy importante. De poco sirve tener un sensor de bajo ruido, y una electrónica de procesado ágil y potente si la imagen que el objetivo proyecta sobre el sensor es de mala calidad. La óptica habrá de ser lo más clara posible para evitar lo más posible tener que hacer uso del flash (interesante tener bajos F). Es un requisito prácticamente indispensable que la óptica tenga la posibilidad de variar su longitud focal: dicho de otro modo, que cuente con zoom óptico. El zoom óptico es realmente una figura de mérito, no así el digital que no aporta nada a la calidad de las imágenes, puesto que el aumento en la imagen se consigue mediante interpolación (‘imaginando’ el color de los nuevos pixels creados). Conviene tratar de seguirle la pista al fabricante del objetivo de una cámara digital y comprobar que éste es de prestigio. Afamados fabricantes de ópticas son: Canon, Carl Zeiss, Olympus …
El almacenamiento
La práctica totalidad de los modelos de cámaras digitales vienen con una cantidad de memoria que a menudo resulta insuficiente para el almacenamiento de las fotos. Tal vez el mejor consejo en la compra de una cámara digital con respecto a la memoria de almacenamiento de las fotos sea que reservemos una parte del presupuesto para la compra de una tarjeta de cierta capacidad de almacenamiento. Cuanto menor sea la tarjeta, con mayor frecuencia tendremos que ir al ordenador a descargarlas. Imagina la faena que supone estar en un viaje único y quedarte sin la posibilidad de realizar más fotografías porque tienes la tarjeta llena… Afortunadamente, en los últimos meses, el precio de las tarjetas de memoria ha caído en picado, por lo que hacerse con una tarjeta de, digamos, unos 256 MB no supone un tremendo esfuerzo económicoEn cuanto a qué tarjeta de memoria es más conveniente, puedes echar un vistazo a este artículo sobre tarjetas de memoria. Tal vez la conclusión pueda ser que no debería dejar de elegirse un modelo de cámara digital por el tipo de memoria que usa. Pero eso, como todo, va en gustos.
Para los amantes del control y la fotografía artística, tal vez pueda ser un requisito el que la cámara disponga de un formato de almacenamiento no comprimido o con compresión SIN pérdidas (los más típicos son RAW y TIFF). Ocupan mucho más, pero la calidad de la imagen será superior. En cualquier caso, para la mayor parte de usos de aficionado, incluso de aficionado avanzado, la calidad tipo superfina (la más alta calidad de compresión con pérdidas) cubre perfectamente el expediente. Para un mayor detalle acerca de los formatos, compresiones y tamaños echar un vistazo a este artículo sobre Formatos de almacenamiento de imágenes
Alimentación
Otro factor a tener en cuenta es el tipo de pilas o baterías que usa la cámara digital. Más importante aún si cabe es la autonomía que tenga la cámara. A este respecto, hay dos grandes tipos de baterías:
- Baterías propietarias Generalmente ofrecen una mayor capacidad de almacenamiento de energia que las convencionales, y para una capacidad de carga semejante ocupan menor espacio que las pilas. Las mejores son las de ion-litio (Ion-Lithium).
- Pilas convencionales Normalmente los las pilas de tipo AA de toda la vida. Se recomienda el uso de pilas recargables, por precio, porque dan una mayor autonomía que las alcalinas equivalentes, y porque es más ecológico. La gran ventaja de este tipo de pilas frente a las baterías propietarias es que en cualquier sitio que te quedes sin pilas puedes comprar un juego de alcalinas a bajo precio y seguir funcionando. Además las recargables suelen ser más baratas que las baterías propietarias
De decantarnos por una cámara con batería propietaria, procuraría que el cargador de la batería fuese una cartuchera externa, y que la carga no tuviera que hacerse en la propia cámara (para preservarla). Por otro lado, reservaría una parte de mi presupuesto para comprar otra batería de reserva para cuando se agote la primera
Si nuestra elegida usa pilas convencionales me haría con un par de juegos de pilas recargables de NiMH y un cargador (en caso de que este no venga incorporado).
La descarga de fotografías al ordenador y la visualización de estas en televisión se hace en lugares donde hay tomas de corriente convencional, por lo que si nuestra cámara incorpora un alimentador para corriente AC mejor que mejor.
Conexión al PC
Muy importante: conocer el tipo de conexión con el PC para la transferencia de las fotografías tomadas. La mayor parte de las cámaras digitales en la actualidad incorporan un puerto USB para el volcado de las fotografías al PC. Si tu computadora es un poco antigua, es posible que no disponga de este tipo de puertos, por lo que deberás reservar parte de tu presupuesto para la compra de una tarjeta de puertos USB.
Flash
La mayor parte de las cámaras digitales en la actualidad traen incorporado un flash. Es importante que este flash tenga una potencia suficiente. Consumirá más rápidamente las baterías, pero posibilitará el realizar fotografías adecuadamente expuestas. Por otro lado, es interesante, sobre todo para equipos de gama media-alta, la posibilidad de sincronización con un flash externo más potente.
Controles manuales
Si tienes planificado hacer tus pinitos en el mundo de la fotografía artística, o te interesa tener un mayor control sobre los elementos que fotografías, es necesario que la cámara digital que elijas te permita manipular ciertos parámetros a voluntad. Debe, pues, contar con modos de prioridad por abertura, prioridad por obturación, modo totalmente manual, manipulación manual del enfoque, ajuste manual del balanceo de blancos…
Precio
Y, por supuesto, el precio. El mejor consejo respecto al precio es que se sea flexible en función de las necesidades. Muchas veces, el precio es lo primero que se decide antes, incluso, de saber para qué se quiere la cámara. Si nuestras posibilidades económicas no están a la altura de nuestros requisitos, es preferible postergar nuestro salto al mundo digital para cuando hayamos ahorrado un poquito más y/o hayan bajado un poquito los precios. Muchas veces se hace una compra que nos va a dejar insatisfechos por no gastarnos 50 euros más, o por no esperar al momento adecuado.
Falsos mitos
A continuación se añaden una serie de falsas ideas que se tienen a la hora de valorar qué cámara digital se ajusta más a nuestras necesidades.
- »Cuantos más megapixels tenga mejor es la cámara» En las ofertas de precios escandalosos de fabricantes desconocidos, una cámara de muchos megapixels suele venir acompañada de una óptica infame. El resultado: fotografías de muy mala calidad
- »Cuanto más zoom mejor es la cámara» Hay que matizar que el zoom realmente interesante es el óptico. Si una cámara no dispone de zoom óptico es muy probable que su óptica sea de muy mala calidad
- »Una cámara que lo tiene todo automático es mejor que otra con controles manuales» Las cámaras que tienen controles manuales incluyen también los automáticos, lo que no sucede siempre al contrario. Cuando una cámara digital incluye controles manuales no es porque no tenga mecanismos para calcular los valores ideales de un modo automático, sino porque se le da la opción al fotógrafo de manipular estos a voluntad
- »Cuanto más pequeña es una cámara mejor es» No es una verdad universal. Es mejor para aquellos que primen el espacio por encima de todo. Pero la reducción de espacio no es gratuita. Las cámaras réflex son mucho más grandes, pero no por capricho. Hay muchas fotografías de alta calidad que no están al alcance de las cámaras ultra-compactas
Conclusiones
En definitiva, antes de apresurarte a elegir conviene que leas artículos como este, que eches un vistazo en el foro para ver qué se cuenta de los diferentes modelos de cámaras, que leas opiniones de los usuarios… Las diferentes secciones de dZoom te pueden ayudar en ese proceso. Y que por último, veas si el precio al que se puede encontrar en el mercado está dentro de tus posibilidades. En caso contrario, ten en cuenta que, en las tiendas de Internet las cámaras suelen tener un precio mucho más reducido, y que el mercado de segunda mano empieza a funcionar. En cualquier caso, siempre puedes esperar un poco más con tu cámara convencional de toda la vida, mientras ahorras ese poquito más que te falta para dar el salto a la fotografía digital
Fuente | D Zoom