En Reinosa es obligado pasar por Casa Vejo, y degustar el paladar con algunas de las exquisiteces que ofrecen al viajero, ya sean pantortillas, hojaldres, navajas, florentinos, turrones, polvorones de pura almendra o ahora que nos aproximamos al día de Reyes, roscones de Reyes de hojaldre, si bien también los hay de bollo, rellenos de nata o no.
No solo dulces hay en Casa Vejo, también hay salado. Para saciar el hambre, nada mejor que endiñarte entre pecho y espalda un emparedado de varias capas, con un poco de todo. Un emparedado inabarcable, que ha de ser apuntalado con palillos para no desmoronarse. Hay otros muchos platos y una amplia gama de dulce y salado donde elegir.
El escaparate es un primor y uno se queda extasiado mirándolo. En la foto que tomé, se ve una bota gigante hecha de mazapán.
Cambiando de tercio, decir que en el Teatro es posible ver películas al modico precio de tres Euros. En breve, estrenarán Casino Royale, El perfume…
Uno no se acuerda ya de estas marquesinas donde venían anunciadas las películas, como se ve en la foto. Dos son las películas en cartel: Cristobal Mólón y En busca de la piedra mágica, ambas destinadas al público infantil, a un euro la entrada. Nada que ver con los actuales multicines donde hay doce salas y el mismo número de películas o más en cantar.