Después de haber pasado el fin de semana por el valle del Baztán, ahí dejo unas fotos e impresiones. De entrada decir que el Baztán, para los que vamos de Logroño nos queda relativamente cerca. A Erratzu, que es adonde nos dirigimos nosotros, no tardamos ni dos horas en llegar. Primero hay que ir a Pamplona, donde se llega en un plis plas gracias a la autovía y luego tras dejar Pamplona tras haber atravesado media docena de rotondas, en otros cuarenta y cinco minutos te plantas en Erratzu, después de pasar por Elizondo. La carretera después de dejar Pamplona, está muy bien asfaltada y es ancha, cuenta con varios tramos en los que hay carriles de incorporación así que puedes adelantar los camiones que te encuentras. Se atraviesan los túneles de Belate y enseguida te encuentras ya en el Baztán.
Elizondo es el pueblo más grande del Baztán, el sitio adonde va de marcha los jóvenes de los pueblos más próximos. Elizondo es un lugar bonito, cuenta con un río caudaloso, de amplio cauce, desde el que se ven vistas como las de la foto.
En Elizondo comimos en el restaurante Santxotena. Me quedó un regusto amargo y no de la cuajada precisamente, que no tenían, dado que no es temporada de hongos (que es en el otoño) y nos conformamos con comer una menestra y un solomillo de carne del baztán, que estaba bien tierna.
Nos encontramos con esta fuente, donde había esta placa tan cachonda. Una placa futurista, digo yo, pues si no me equivoco estamos todavía en 2010.
No pasamos la oportunidad de comprar en la pastelería Malkorra, chocolate negro con avellanas, al «módico» precio de 27 euros el kilo. El sitio es una cucada, y la joven dependiente una sota de las de la baraja, pero el chocolate que es lo que cuenta está (mejor dicho, estaba) de muerte súbita. Dimos una vuelta siguiendo el curso del río, nos admiramos con las casas, auténticos caserones típicos de la zona, y como empezaba a llover, nos fuimos a Erraztu.
Erratzu es un pueblo pequeño entre montañas. Tiene una iglesia cuyo claustro está en obras. Un puente sobre el caudaloso río Baztán. Un frontón donde los jóvenes pasan las tardes. Un parque de juegos para los más pequeños. Hay también unas cuantas casas rurales, como la Casa Etxebeltzea, donde nos alojamos. Una casa espectacular, antiguo palacete del siglo XIV, con unas habitaciones, la número 2 nos dieron, con cama de 1,80 para los adultos, 1,10 para los niños y espacio más que de sobra para poner una cuna de viaje. Fuera de la espaciosa habitación, un salón gigántesco, con paredes cubiertas de libros, y mobiliario antiguo donde pasar las horas, alejado del mundanal ruido, porque en la habitación no se oye ni un ruido. Dando un paseo por las afueras del pueblo nos encontramos un rebaño de ovejas, una manada de vacas, y caballos dormitando o mirando sorprendidos desde los prados cercanos, y al fondo las montañas verdes, envueltas en brumas, y ellas puntos blancos; caseríos inalcanzablas, suspendidos en el horizonte.
Vista de Erraztu desde la parte trasera del frontón
En el pueblo hay casonas tan espectaculares como esta
Erratzu y toda la zona en general cuenta con una buena infraestructura turística, de ahí que en espacio tan reducido nos encontremos con este listado de casasa rurales.
* Camping Baztan, teléfono 948 45 31 33.
* Casa Rural Etxebeltzea, teléfono 948 45 31 57.
* Casa Rural Ezpondarena, teléfono 948 45 31 88.
* Casa Rural Hualdea, teléfono 948 45 31 74.
* Casa Rural Indatxipia, teléfono 948 45 31 21.
* Casa Rural Juanillo, teléfono 948 45 33 56.
* Casa Rural Kordoa, teléfono 948 45 32 22.
* Casa Rural Marimartindenea, teléfono 948 45 31 17.
* Casa Rural Bazarabal I y II, teléfono 948 45 31 58.
* Casa Rural Dolareta, teléfono 948 45 32 69.
* Casa Rural Indakoetxea I y II, teléfono 948 45 31 03.
* Casa Rural Iztikotenea I y II, teléfono 948 45 31 09.
* Casa Rural Kastonea I y II, teléfono 948 58 13 93.
* Casa Rural Martikotenea I y II, teléfono 948 45 30 94.
* Casa Rural Senperenea, teléfono 948 45 31 58.
* Casa Rural Urrain I, teléfono 948 45 31 10.
* Casa Rural Urrain II, teléfono 948 45 31 10.
De hacer alguna visita por la zona, de los muchos lugares que había que visitar, nos decantamos por la localidad de Zugarramurudi. Allí están las cuevas, cuya visita te lleva alrededor de una hora. El sábado abrían a las 11 de la mañana y fuimos los primeros visitantes, así que cuando ya habíamos acabado la visita, era cuando llegaban el resto de visitantes. Desde el mirador, las vistas son espectaculares. En lontananza se ven los caserones de muchos pueblos, tanto españoles como franceses.
Después de ver las cuevas, una buena opción es ver el Museo de las Brujas, donde ver paneles informativos, vídeos (akelarres, orígenes del la brujería), nombres y apellidos de personas acusadas de brujería, etc.
A los que somos de Logroño la placa de la foto nos resulta curiosa, pues hace menos de dos meses, hubo un hermanamiento entre nuestra ciudad y Zugarramurdi.
El pueblo se nota que es zona fronteriza, pues había ríadas de ciclistas y turistas franceses. De hecho el pueblo de Sare, en territorio galo, está a tiro de piedra, a 14 kilómetros. Lo mismo se puede decir de Errazturespecto de Saint-Jean-Pied-de-Port, que está a unos 28 kilómetros.
Lo que más me ha gustado sin lugar a dudas ha sido el paisaje, las montañas verdes, las ovejas pastando, los caballos, las vacas, en un escenario vegetal exuberante.
El Baztán es un lugar maravilloso para perderse. Un paisaje precioso. Buena gastronomía y buena gente. Erraztu es un pueblo encantador, bien ubicado para ver otros muchos lugares, tanto del Estado Español como de Iparralde.