Dirección: Larry Charles.
País: USA.
Año: 2006.
Duración: 84 min.
Género: Comedia.
Interpretación: Sacha Baron Cohen (Borat), Ken Davitian (Azamat).
Guión: Sacha Baron Cohen, Anthony Hines, Peter Baynham y Dan Mazer; basado en un argumento de Sacha Baron Cohen, Peter Baynham, Anthony Hines y Todd Phillips.
Producción: Sacha Baron Cohen y Jay Roach.
Música: Erran Baron Cohen.
Fotografía: Anthony Hardwick y Luke Geissbuhler.
Montaje: Peter Teschner y James Thomas.
Dirección artística: David
Sacha Baron Cohen se ha convertido en todo un fenómeno mediático con esta película. Otro de sus personajes Ali G, también se llevó a la pantalla grande.
Borat se puede calificar como irreverente. Un proyecto que destila mucha mala uva. Borat es una Kazajo, el segundo mejor de reportero de su país, a tenor del título de la cinta, el cual tiene la «suerte» de ir a los Estados Unidos, para ver como es la forma de vida de ese país y luego contárselo a sus paisanos.
Borat se ve metido en todas las salsas, así en una roulette compartirá cervezas con unos jóvenes, y verá como el amor de su vida se dedica a hacer felaciones a su marido, ante una videocámara que luego recorrerá medio mundo, porque Borat se enamora perdidamente de CJ, Pamela Anderson, la actriz de «Los Vigilantes de la Playa», cayendo rendido a sus pies al verla en un bañador roja que muestra bien sus generosas proporciones.
Borat entonces quiere a toda costa no conocerla sino pedirla su mano, cosa que tendrá ocasión de llevar a cabo con consecuencias impredecibles.
Lo más pasmoso del asunto es cuando la película se asemeja a un documental, Borat es capaz de pedir a un dependiente la mejor pistola para matar a un judío, o el mejor coche para llevarse por delante un puñado de gitanos, sin que ninguno de los dependientes haga el menor gesto de repulsa.
No es usual que un producto como este llegue a los cines, ya que la mayoría de las comedias son bastante insulsas. Borat, muestra su lado más tierno y vulnerable al final de la película. Borat pretende más crear polémica a mi modo de ver que otros fines, y para ello saca a colación judíos, gitanos, homosexuales…
Borat no es la comedia del año pero tiene unos ramalazos de mala leche de agradecer.
sinceramente lo digo desde todos los
puntos de vistas, me gusta sacha baron cohen no solamente porque es judío, sino tambien por su inteligencia y carisma, que cubre todo el atractivo corporal, es decir no es un johnny depp o un brad pitt, no es de esos huecos que llegan a la fama por casualidad o porque le giñó el ojo a una productora de 200 años, sino que llego a la fama por su inteligencia que cada dia me sorprende mas
los quiere mucho
ana borstein de cohen