Antes de hacer turismo por la zona de Soria estuve hojeando el libro de Dionisio Ridruejo, de título Soria. No lo examiné al detalle ya que concebí el viaje como una aventura, más que como una confirmación de lo que había leído.
Soria es una provincia limítrofe con La Rioja, a la que se accede tras cruzar el túnel de Piqueras. El recorrido nos llevó por los pueblos de Almazán, Morón de Almazán, Monteagudo de las Vicarías, Santa María de Huerta, Rello, Medinaceli, Berlanga de Duero, Burgo de Osma, San Esteban de Gormaz, para luego descender a tierras segovianas, al encuentro de Ayllón, Riaza, Pedraza y Segovia. Al regresar hacia Soria visitamos Calatañazor.
Tanto Soria como Segovia nos hizo disfrutar de pueblos preciosos, de una gastronomía (torreznos, recetas elaboradas con boletus como la tapa micológica, o la sopa castellana y el consabido cochinillo asado en Segovia, sin olvidarnos de un detalle para los más lamerones, hablo de los chocorreznos) para quitarse el sombrero, vimos fortalezas y castillos, monasterios cistercienses, arcos romanos. Y como fue en Semana Santa, tuvimos ocasión de ver también dos procesiones en la ciudad de Soria.
Almazán
Morón de Almazán
Monteagudo de las Vicarías
Monteagudo de las Vicarías
Monteagudo de las Vicarías
Santa María de Huerta
Medinaceli
Medinaceli
Medinaceli
Rello
Berlanga de Duero
Torreznos
Sopa castellana
Burgo de Osma
Ayllón
Riaza
Pedraza
Pilón
Segovia
Segovia
Segovia
Segovia
Calatañazor
Calatañazor y chocorreznos
Antonio Machado entregado a lectura
Procesión de Semana Santa en Soria